El Baccarat es un juego de cartas que ha ganado popularidad en los casinos de todo el mundo. Aunque puede parecer complicado a primera vista, en realidad es un juego bastante sencillo de entender una vez que se conocen las reglas básicas.
El objetivo del Baccarat es apostar por la mano que se acerque más al valor de 9. En este juego participan dos manos, la del jugador y la de la banca. Cada mano recibe dos cartas al inicio y se suman sus valores para determinar el ganador.
Las cartas numéricas (del 2 al 9) mantienen su valor nominal, mientras que las cartas con figuras (J, Q, K) y el 10 tienen un valor de 0. La carta As tiene un valor de 1. Si la suma de las cartas de una mano supera 9, se le resta 10 al valor total.
Las reglas básicas del Baccarat se pueden resumir de la siguiente manera:
1. Se reparten dos cartas a la mano del jugador y a la mano de la banca.
2. Si la suma de las cartas es 8 o 9 en la mano del jugador o la banca, se considera “natural” y se anuncia el ganador.
3. Si la suma es menor a 8, se pueden pedir cartas adicionales a una o ambas manos para acercarse a un valor de 9.
4. El jugador puede apostar por la mano del jugador, la mano de la banca o un empate.
5. Si se acierta en la apuesta por la mano del jugador, se paga 1:1. Si se acierta en la apuesta por la mano de la banca, se paga 0.95:1 (se cobra una comisión del 5%).
6. En caso de un empate, se devuelve la apuesta.
Aunque existen algunas variantes del Baccarat que pueden complicar un poco las reglas básicas, estas son las normas generales que se aplican en la mayoría de los casinos. Con un poco de práctica, cualquiera puede aprender a jugar Baccarat y disfrutar de la emoción de apostar en este popular juego de cartas.