Microsoft adelgaza la Surface 3 para insistir en la era de la movilidad extrema
En un mundo donde la movilidad es cada vez más importante, Microsoft ha decidido tomar medidas para adaptarse a las necesidades de los usuarios. La última incorporación a su línea de productos, la Surface 3, es un claro ejemplo de esta estrategia.
La Surface 3 es una tablet ultradelgada que combina la portabilidad de un dispositivo móvil con la potencia de un ordenador portátil. Con un grosor de tan solo 8,7 mm y un peso de 595 gramos, es un dispositivo ligero y fácil de transportar. Pero no deja de lado el rendimiento, ya que cuenta con un procesador Intel Core i5 de décima generación y hasta 16 GB de RAM, lo que la convierte en una herramienta poderosa para trabajar en movimiento.
Además, la Surface 3 viene con una pantalla táctil de 13,5 pulgadas con una resolución de 2256 x 1504 píxeles, que ofrece una experiencia visual nítida y vibrante. También incluye un lápiz óptico Surface Pen para facilitar la interacción con el dispositivo, así como conectividad LTE para estar siempre conectado.
Pero lo más impresionante de la Surface 3 es su duración de la batería, que puede llegar a las 15 horas, lo que la convierte en un compañero ideal para largas jornadas de trabajo fuera de la oficina. Además, cuenta con un sistema de refrigeración pasiva que evita el sobrecalentamiento del dispositivo, garantizando un rendimiento óptimo en todo momento.
Con la Surface 3, Microsoft demuestra su compromiso con la movilidad extrema, ofreciendo un dispositivo potente, ligero y duradero que se adapta a las necesidades de los usuarios modernos. Ya sea para trabajar, estudiar o entretenerse, esta tablet tiene todo lo necesario para ser un aliado indispensable en el día a día.